Un conflicto gremial entre maquinistas de buques petroleros y compañías del sector amenaza con paralizar el transporte de hidrocarburos, informaron portavoces empresariales.
El sindicato que agrupa a los maquinistas de barcos petroleros reclama aumentar a partir de este mes sus francos compensatorios para tener un día por cada jornada trabajada, pero las firmas del sector rechazaron el pedido.
Entre las firmas afectadas figuran Petrobras, de capitales brasileños, y las argentinas Ultrapetrol, Antares y Horamar, entre otras.
De forma "sorpresiva" el gremio "rompió el acuerdo laboral alcanzado a fines del año pasado y presiona con paralizar la flota petrolera nacional", indicó un comunicado de la Cámara Naviera Argentina y la Cámara Argentina de Empresas Navieras y Armadoras.
"Ellos amenazaron con iniciar una huelga si no atendemos a la demanda. Ayer, un grupo de empleados detuvo un buque de la empresa Horamar. Y, de continuar con estas medidas, pueden afectar la matriz energética", añadió a Efe un portavoz de la Cámara Naviera Argentina.
Representantes de las compañías y de los trabajadores se reunirán el próximo lunes en el Ministerio argentino de Trabajo para intentar llegar a un acuerdo.
De todas formas, las cámaras empresarias advirtieron que "de accederse a cualquier cambio en las actuales condiciones de trabajo por parte de los empleadores, desencadenaría un efecto dominó en los demás gremios embarcados" que "elevaría el costo de operación".
"De no llegarse a un acuerdo peligraría el abastecimiento de combustibles, tanto para las destilerías como para las usinas eléctricas y estaciones de servicio", añadió la nota de las cámaras.