La víctima fue intervenida quirúrgicamente en Dénia (Valencia, España) y la policía detuvo al agresor.
Un empleado de la construcción de raza negra acuchilló ayer en Dénia a un compañero de trabajo harto de sus insultos racistas, según la investigación. La Policía Nacional arrestó al agresor. El herido tuvo que ser hospitalizado e intervenido quirúrgicamente por una lesión de arma blanca en la zona lumbar.
Un empleado de la construcción resultó herido de gravedad ayer por la mañana en su puesto lde trabajo. Sin embargo, la lesión no tuvo origen en un accidente, sino en una pelea con otro trabajador de otra subcontrata de la obra, ubicada a las afueras de Dénia.
El hombre sufrió una profunda incisión causada por arma blanca en la zona lumbar y tuvo ser trasladado por una ambulancia del SAMU al Hospital Comarcal para ser intervenido de urgencia.
Al parecer, la discusión se veía venir. Según indicaron fuentes policiales tras interrogar al personal de la obra, la víctima llevaba un cierto tiempo realizando comentarios racistas al que ayer se convirtió en su agresor, un hombre de raza negra.
Beber de la misma botella
La disputa comenzó pasadas las once de la mañana. Al parecer, el agresor se dirigió a beber de una botella de agua cuando su compañero le recriminó que se atreviera “a beber de la misma botella de la que bebo yo”.
El albañil, harto ya de soportar la humillación durante su horario laboral, se encaró con su compañero y empezó a empujarle. Después se dirigió a una mochila y sacó un cuchillo que presuntamente acabó clavando en la espalda de su contrincante. La llamada de una persona ajena a la obra alertó a las fuerzas de seguridad de Dénia, que acudieron de inmediato a la nave industrial en construcción.
En un principio, barajaron la posibilidad de que la víctima se hubiera herido con alguna estructura punzante o herramienta al caer tras uno de los empujones del agresor. Pero luego encontraron el arma y confirmaron que la víctima había sido acuchillada.
Los agentes arrestaron al agresor y tomaron declaración a varios testigos que dieron algunas pinceladas del trato xenófobo al que estaba sometido durante su horario de trabajo.
Por su parte, el agredido fue conducido al hospital de Dénia, donde fue operado de sus lesiones, que aunque revisten gravedad al cierre de esta edición no hacían peligrar su vida.