Representante de General Motors asegura que la fábrica de Alvear no corre peligro

El presidente de General Motors (GM) para Argentina y el Cono Sur, Edgar Lourencon, aseguró que "no corre peligro" de cierre la fábrica de Santa Fe, a pesar de la profunda crisis que la marca atraviesa a nivel mundial.

Lourencon dijo que la operación argentina de GM "no corren peligro" porque actualmente trabaja en forma legal, operativa, autónoma y autosustentable", en relación a la casa matriz que entraría en concurso de acreedores esta semana.

Las acciones de la firma perdieron en Estados Unidos un 20 por ciento en una sola jornada el último martes al caer a 1,14 dólares, un precio que se ubicó en el nivel al que los papeles llegaron en 1933, tras la Gran Depresión.

Pero a pesar de esa dramática situación, Lourencon descartó en declaraciones a la prensa rosarina que la planta santafesina vaya a tener complicaciones de producción o para sostener el empleo de sus trabajadores.

Se trata de la planta ubicada en la localidad santafesina de Alvear, a 15 kilómetros de Rosario, donde trabajan unos 2000 operarios que a fines de 2008 firmaron un acuerdo laboral con la empresa para evitar despidos durante 2009.

Los temores del colapso parecen no tocar por el momento a la fábrica santafesina donde los operarios ya trabajan en la producción de un nuevo modelo que entrará al mercado en el último cuatrimestre del año.

"Las empresas de América latina son unidades legalmente independientes. Si GM en Estados Unidos entra en concurso nosotros no tenemos ninguna obligación de hacer lo mismo", aseguró el representante de la empresa.

Las plantas de Latinoamerica no tienen dependencia operativa con la casa matriz, por lo que no necesitan su dinero y se financian con las colocaciones que realizan en el mercado automotor internacional.

"América latina da resultados positivos desde hace muchos años.

El año pasado se vendieron 1,3 millones de autos en la región", destacó Lourecon.

Actualmente, no ingresan al mercado argentino automóviles construidos en las plantas de Estado Unidos, sino que el mercado local se abastece de las fábricas de Alvear y Brasil.

"Embarcamos a la planta de Santa Fe en el proyecto Viva, en el que se invirtieron 500 millones de pesos. Se trata de la fabricación de un modelo que se venderá a toda la Región", explicó el empresario.

Para ello, la planta santafesina compró unos 70 robots de última generación y contrató temporalmente a 150 ingenieros extranjeros.

"O sea, la operación en Alvear está garantizada", insistió Lourencon.

GM Argentina vendió 615 mil unidades en 2008, un número que alcanzó un récord histórico, y para este año la firma preve comercializar 470 mil.

Esa comercialización significa una caída del 25 por ciento respecto del año pasado, para ubicarse en niveles de venta 2006 que estaró por debajo de lo que los empresarios llaman "un buen mercado maduro" de 500 mil unidades.

Por otra parte Argentina, crecen las versiones sobre una posible ayuda financiera del Gobierno de Cristina Kirchner para la planta santafesina.

El Gobierno podría ayudar a las automotrices General Motors, Mercedes-Benz y PSA Peugeot-Citro‰n, quienes recibirían unos 250 millones de pesos de la ANSeS.

La Administración central quiere evitar que las compañías registren problemas financieros que las obliguen a realizar ajustes que comprometan las fuentes laborales.

 

Dejá un comentario