Responsables del metal y la construcción señalan como factores clave para colocarse la actitud ante el empleo y la voluntad de aprendizaje.
Los empresarios asturianos dicen valorar el perfil académico, la cualificación laboral, la experiencia profesional y el resto de datos que habitualmente componen un currículum vitae, pero si algo admiten apreciar de modo superlativo los ofertantes de empleo son dos actitudes: las ganas de trabajar y la voluntad de aprender. Ésas son, según expertos en gestión de recursos humanos que ayer pasaron por las Jornadas de empleo y formación de Avilés, las dos llaves maestras que abren todas las puertas del mercado laboral.
Rafael Bernardo, responsable de formación de Femetal, la asociación patronal que da cobertura a 481 empresas y a 35.500 trabajadores en Asturias, fue directo al grano: «Los empresarios buscan trabajadores polivalentes, que tengan conocimientos básicos de las actividades en las que van a trabajar y, ante todo, que muestren voluntad de aprendizaje y ganas de trabajar».
Bernardo habló en la sesión de clausura de las Jornadas avilesinas sobre formación y empleo en nombre de un sector que lleva años repitiendo la misma cantinela: en Asturias faltan caldereros, soldadores, torneros, fresadores, tuberos… La proporción de puestos de trabajo «de oficio» y «de cuello blanco» en el metal es de ocho a dos.
«La cantera laboral del metal» -manifestó el ponente- «es la FP, pero también se puede acceder al empleo en nuestro sector por la vía de la formación ocupacional especializada». Según aseguró Bernardo, las conocidas necesidades de personal del sector son «de urgente solución», pues, además de nuevas incorporaciones para atender el crecimiento de la actividad, las empresas están inmersas en un proceso de rejuvenecimiento de plantillas.
El sector asturiano de la construcción padece problemas similares al del metal, según comentó Cruz Díez, responsable de la agencia de colocación de la Fundación Laboral de la Construcción (FLC). «Existe escasez de albañiles, encofradores, encargados de obra, gruistas y maquinistas. El 80 por ciento de los puestos ofertados es de esas especialidades, lo que proporciona altos índices de empleabilidad a esos oficios. Aun así, harían falta más profesionales», declaró Díez. Para ampliar información al respecto, la responsable de la FLC recomendó visitar la página web educastur.princast.es, donde existe un acceso a un área de asesoramiento con fichas específicas de cada oficio de la construcción, su índice de empleabilidad y las tendencias de futuro que se auguran.
El tercer ponente invitado a disertar sobre los profesionales que demandan las empresas asturianas fue el presidente de la Unión de Comerciantes de Avilés (UCAYC), Faustino Álvarez. El representante del comercio comarcal reclamó mayor flexibilidad legal para contratar, incentivos que hagan atractivo emprender una carrera profesional en el comercio y asesoramiento para aquellos empresarios, especialmente los noveles, «muy buenos en lo suyo, pero que se ven superados por el papeleo».
Al término de la mesa redonda se clausuraron las Jornadas de empleo y formación, que se habían inaugurado el martes y acogieron el desarrollo de una docena de charlas divulgativas.

Responsables del metal y la construcción señalan como factores clave para colocarse la actitud ante el empleo y la voluntad de aprendizaje.
Los empresarios asturianos dicen valorar el perfil académico, la cualificación laboral, la experiencia profesional y el resto de datos que habitualmente componen un currículum vitae, pero si algo admiten apreciar de modo superlativo los ofertantes de empleo son dos actitudes: las ganas de trabajar y la voluntad de aprender. Ésas son, según expertos en gestión de recursos humanos que ayer pasaron por las Jornadas de empleo y formación de Avilés, las dos llaves maestras que abren todas las puertas del mercado laboral.
Rafael Bernardo, responsable de formación de Femetal, la asociación patronal que da cobertura a 481 empresas y a 35.500 trabajadores en Asturias, fue directo al grano: «Los empresarios buscan trabajadores polivalentes, que tengan conocimientos básicos de las actividades en las que van a trabajar y, ante todo, que muestren voluntad de aprendizaje y ganas de trabajar».
Bernardo habló en la sesión de clausura de las Jornadas avilesinas sobre formación y empleo en nombre de un sector que lleva años repitiendo la misma cantinela: en Asturias faltan caldereros, soldadores, torneros, fresadores, tuberos… La proporción de puestos de trabajo «de oficio» y «de cuello blanco» en el metal es de ocho a dos.
«La cantera laboral del metal» -manifestó el ponente- «es la FP, pero también se puede acceder al empleo en nuestro sector por la vía de la formación ocupacional especializada». Según aseguró Bernardo, las conocidas necesidades de personal del sector son «de urgente solución», pues, además de nuevas incorporaciones para atender el crecimiento de la actividad, las empresas están inmersas en un proceso de rejuvenecimiento de plantillas.
El sector asturiano de la construcción padece problemas similares al del metal, según comentó Cruz Díez, responsable de la agencia de colocación de la Fundación Laboral de la Construcción (FLC). «Existe escasez de albañiles, encofradores, encargados de obra, gruistas y maquinistas. El 80 por ciento de los puestos ofertados es de esas especialidades, lo que proporciona altos índices de empleabilidad a esos oficios. Aun así, harían falta más profesionales», declaró Díez. Para ampliar información al respecto, la responsable de la FLC recomendó visitar la página web educastur.princast.es, donde existe un acceso a un área de asesoramiento con fichas específicas de cada oficio de la construcción, su índice de empleabilidad y las tendencias de futuro que se auguran.
El tercer ponente invitado a disertar sobre los profesionales que demandan las empresas asturianas fue el presidente de la Unión de Comerciantes de Avilés (UCAYC), Faustino Álvarez. El representante del comercio comarcal reclamó mayor flexibilidad legal para contratar, incentivos que hagan atractivo emprender una carrera profesional en el comercio y asesoramiento para aquellos empresarios, especialmente los noveles, «muy buenos en lo suyo, pero que se ven superados por el papeleo».
Al término de la mesa redonda se clausuraron las Jornadas de empleo y formación, que se habían inaugurado el martes y acogieron el desarrollo de una docena de charlas divulgativas.