Nicaragüenses emigran a países vecinos para sobrevivir

MANAGUA. Como miles de nicaragüenses desempleados, Carlos Martínez espera ansioso desde hace meses una oportunidad de trabajo temporal en la vecina Costa Rica, en busca del sueldo para mantener a la familia que no consigue en su propia tierra.
Martínez, de 30 años, ya estuvo dos veces en la cosecha de café costarricense. "En Costa Rica hay más oportunidades para mí que acá," dijo el hombre de mirada cansada y manos rudas.
Nicaragua, el país más pobre del continente detrás de Haití,pierde de esta manera gran parte de su mano de obra.
Los nicaragüenses emigran hacia Costa Rica, considerado el país más próspero de Centroamérica, o El Salvador, al igual que guatemaltecos, hondureños y salvadoreños lo hacen hacia Estados Unidos.
Martínez esperaba a las puertas de la Casa del Obrero de la capital Managua algún avance sobre la solicitud de 10.000 albañiles que hicieron el año pasado empresarios de Costa Rica. Pero hasta ahora, sólo 38 obreros han conseguido trabajo.
Como el proceso va tan lento, Martínez, que tiene dos hijos que alimentar, planea lanzarse "a la aventura."
Unos 400.000 nicaragüenses viven legalmente o no, temporal o definitivamente en Costa Rica, y unos 200.000 en El Salvador, según estadísticas oficiales. Sin embargo, organizaciones no gubernamentales dicen que esos números son mucho mayores.
"La depresión de los salarios reales incita a emigrar y al envío de remesas a quienes se quedan," dijo Luis Rocha, investigador del Servicio Jesuíta para Migrantes de Centroamérica.
En el sector agrícola de Nicaragua, el salario mínimo ronda los 50 dólares por mes y unos 100 dólares en la construcción y la industria textil. Estos salarios normalmente se triplican en El Salvador y Costa Rica.
"Me voy por la situación económica. No hay pegue (empleo) y, si hay trabajo, es raquítico lo que se gana," dijo Denis Tercero, de 36 años, luego de pagar 20 dólares por una visa en el consulado de Costa Rica y un boleto de autobús de 30 dólares para viajar a San José a trabajar en una finca.

MALTRATO Y REMESAS

Daniel Ortega, el presidente y ex guerrillero sandinista de Nicaragua, ha culpado de la sofocante pobreza y desempleo al modelo económico implementado por sus antecesores derechistas.
Ortega, que en enero cumplió un año en el poder, reconoció que aún falta mucho por hacer, pese a haber lanzado planes para dar tierras a los más pobres, haber estatizado servicios de salud y educación e puesto en marcha un plan que en cinco años busca ayudar a 75.000 familias a generar producción agrícola.
Pero la vida tampoco es fácil para los "nicas," como se los llama en la región, en Costa Rica.
Muchos de los que llegan como ilegales terminan vendiendo dulces en las calles, como empleados domésticos, o son maltratados.
En un crudo episodio que tensó las relaciones entre los dos países, un nicaragüense de 25 años murió en el 2005 atacado por dos perros Rottweiler ante la pasividad de la policía.
Los propietarios de los perros y algunos costarricenses justificaron el ataque, asegurando que el muchacho había entrado a un taller mecánico para robar en la localidad de Cartago.
Pero hay que sobrevivir, y muchos nicaragüenses dejan su tierra para no volver más que a llevar dinero a su familia.
Roberto Espinoza, de 37 años, llegó hace trece años a la localidad salvadoreña de Santa Rosa de Lima desde la ciudad nicaragüense de Chinandega y trabaja en un puesto de abarrotes.
"Por ahora estoy bien acá, no tengo idea de regresarme a Nicaragua," dijo.
El Banco Mundial calcula que los nicaragüenses en el exterior envían unos 700 millones de dólares al año a sus parientes, lo que representa un 12,5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Los nicaragüenses también emigran en menor medida a Guatemala, Honduras y Panamá.
En una terminal de Managua, Cristina Rosales esperaba para abordar un autobús que la lleve a Ciudad Colón, en Panamá, donde una conocida le consiguió trabajo de empleada doméstica.
"Me voy a trabajar porque aquí no hay empleo y si encontramos pagan una nada y todo está cada día más caro," relató la mujer de 40 años.

2 comentarios en "Nicaragüenses emigran a países vecinos para sobrevivir"

  1. Da lastima ver como la ilusión de la revolución sandinista de desvanece, con los años y que ortega se hace cada ves mas rico y poderoso, gobernando a Nicaragua como si fuera su pequeño feudo, Educación y Mas Educación falta en este país para que el pueblo avance y extirpe de raíz el cáncer de las Dictaduras colonialistas, ya es tiempo que Nicaragua se monte en el tren del siglo XXI, y fortalezca su incipiente Democracia y sus instituciones no mas caudillos lo que se necesita son instituciones independientes y que hagan su trabajo. Despierta pueblo, Despierta

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  2. Es una lastima que eso mismo corran muchos en Centroamerica, quizá más de El Salvador, Honduras y Guatemala, cuando pasan por México hacia E.U.
    Creó que nadie debería ser invidente al sufrimiento de los demas. Yo soy salvadoreño y si algún día llegó a encontrar a alguien que necesite ayuda, crean que lo haré con mucho gusto. A mi no me gusta ver a las personas sufrir, de hecho me caen mal muchos de mis compatriotas en el área oriente de mi país que según he leído por allí, denigran a los hermanos de Nicaragua. SALUDOS DESDE EL SALVADOR

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