La Unión Obrera Metalúrgica (UOM), y los sindicato de Petroleros Privados y el de Estaciones de Servicio, junto con las empresas del sector, continuarán esta semana las negociaciones salariales, luego que los gremios reclamaran aumentos de entre un 25 y 32 por ciento.
Las negociaciones entre los metalúrgicos continuarán este miércoles en la sede de la cartera laboral, tras el último cuarto intermedio en la negociación en la que el gremio reclamó un 25 por ciento de aumento a partir del primero de abril.
La UOM pide que el actual salario básico de 1.800 pesos aumente 25 por ciento, lo que significaría un incremento de entre 500 y 700 pesos, según la categoría.
Por su parte, la Federación Argentina Sindical del Petróleo y la Federación de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, buscarán esta semana reanudar los contactos con las cámara empresarias en el marco del ministerio de trabajo.
Los petroleros privados reiniciarán el próximo jueves las negociaciones salariales en las que reclama un aumento del 32 por ciento y actualizaciones de sueldos básicos y categorías de convenios.
El gremio que lidera Roberto Alberti pide la mejora para sus ramas de refinación, yacimientos y producción de gas y petróleo, que abarca a más de 35 mil trabajadores de petróleo y gas.
Los convenios salariales de los tres sectores, vencieron en diciembre pasado y hasta el momento hay profundas diferencias entre lo ofertado por las cámaras y el reclamo sindical.
La Federación de Obreros y empleados de Estaciones de Servicio (FOESGRA), rechazó ya un ofrecimiento empresario de un aumento del 22 por ciento y tiene en suspenso la realización de un paro de tres días, si fracasan las negociaciones.
Los representantes gremiales y las cámaras empresarias del sector mantendrán nuevas negociaciones el viernes próximo en el ministerio de Trabajo.
El gremio liderado por Carlos Acuña reclama una actualización salarial del 30 por ciento, y las cámaras alegaron que pueden acercarse al reclamo gremial si el Gobierno les mejora su rentabilidad, via reducción de impuestos o aumentos de los beneficios por parte de las compañías petroleras.