BRUSELAS. La Comisión Europea ha pedido este miércoles a todos los Estados miembros retrasar la edad de jubilación y acabar con las prejubilaciones para mejorar la sostenibilidad de los sistemas de pensiones. Bruselas reclama también continuar con la consolidación fiscal y acelerar la reforma del mercado laboral y la reestructuración del sector financiero.
Estas son las principales prioridades que los Gobiernos de la UE deberán seguir a la hora de elaborar sus presupuestos y sus planes de reformas para el año de 2012. Se trata de la primera vez que se pone en marcha el denominado ‘semestre’ europeo, cuyo objetivo es que Bruselas revise los presupuestos nacionales antes de su aprobación parlamentaria para prevenir nuevos problemas de déficit y de divergencias de competitividad que agraven la crisis de deuda.
"Una reforma eficaz de los sistemas de pensiones debe incluir al menos los siguientes elementos: un aumento de la edad de jubilación, ligado a la esperanza de vida; una reducción de los sistemas de prejubilaciones e incentivos para contratar a trabajadores mayores, así como formación continua", ha dicho el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, en un discurso.
Rehn ha explicado que muchos Estados miembros ya han realizado reformas importantes de sus sistemas de pensiones y "otros las están haciendo, desde Grecia hasta España". "Pero es esencial que todos los Estados miembros actúen para garantizar la sostenibilidad y adecuación de sus sistemas de pensiones para los próximos años", ha resaltado.
La Comisión Europea reclama además más reformas en el mercado laboral para reducir el nivel de desempleo. La prioridad debe ser, según Bruselas, condicionar las prestaciones por desempleo a la búsqueda de trabajo y al seguimiento de cursos de formación y aumentar la flexibilidad. Para los países con déficit por cuenta corriente, como España, Rehn recomienda mejorar el sistema de fijación de salarios para evitar perder competitividad.
El Ejecutivo comunitario considera además que todos los Estados miembros deben empezar o continuar este año con la consolidación fiscal, porque se trata de un "prerrequisito para la estabilidad y el crecimiento, y reducir el déficit al menos más de un 0,5% del PIB en términos estructurales, según ha dicho el comisario de Asuntos Económicos.
Para ello, la Comisión defiende recortar primero el gasto, excepto el dedicado a educación y a I+D. Si resulta necesario aumentar los impuestos, Rehn ha aconsejado incrementar primero los indirectos, como el IVA, y ampliar la base imponible antes que subirlos.
Para los países con superávit por cuenta corriente, Bruselas solicita identificar y resolver los problemas que contienen la demanda interna, por ejemplo, la falta de competencia en el sector servicios.
Finalmente, el comisario de Asuntos Económicos ha reclamado a los países que "aceleren la reestructuración de los bancos basándose en la nueva ronda de pruebas de estrés que se llevará a cabo en los próximos meses" y que refuercen su base de capital.
"Es esencial un alto nivel de ambición y una rápida aplicación (de las reformas). Esto se echa en falta demasiado a menudo ahora y por eso pido a los Estados miembros que por favor usen los programas de reformas nacionales como un instrumento para hacer avanzar el debate y las decisiones sobre las reformas necesarias", ha concluido Rehn.