NUEVA YORK. Los despidos planeados por las empresas de Estados Unidos subieron un 7,2 por ciento en septiembre respecto del mes anterior, pero comparados con el mismo mes del 2007 registraron un incremento del 33 por ciento, de acuerdo con un informe del miércoles.
El reporte, elaborado por la consultoría laboral Challenger, Gray & Christmas Inc, ensombreció aún más el panorama del mercado laboral de Estados Unidos.
Los empleadores anunciaron planes para recortar 95.094 puestos de trabajo en septiembre, un alza desde 88.736 en agosto y 71.739 en septiembre del año pasado, dijo Challenger.
Los recortes de empleos de septiembre implicaron un total de 287.142 despidos en el tercer trimestre, récord trimestral de recortes desde el cuarto trimestre del 2005, dijo el reporte.
Eso representó una subida de 4,3 por ciento desde los 275.292 del segundo trimestre y un alza de 48 por ciento desde los 194.095 despidos anunciados en el tercer trimestre del 2007, agregó.
El vapuleado sector financiero, contra lo que se esperaría, hizo poco daño al mercado laboral en septiembre, aunque podrían pasar meses hasta que se sientan los efectos completos de la última ronda de la crisis del crédito.
El sector financiero anunció 8.244 recortes de puestos durante el mes, con lo que se ubicó cuarto entre las industrias que evalúa la firma Challenger.
No obstante, el sector financiero aún sigue primero en pérdidas de empleos en el año a la fecha, con 111.201. El sector ha sido golpeado duramente por el peor declive inmobiliario desde la Gran Depresión y las turbulencias de los mercados.
"Podrían pasar varias semanas o meses para que las consecuencias de la turbulencia de Wall Street en septiembre afecten a los números del empleo", dijo en el informe John A. Challenger, presidente ejecutivo de Challenger, Gray & Christmas.
El sector de la computación fue el de mayores recortes de septiembre, con 25.715 anuncios, seguido por la industria automotriz, con 14.595 y la de ropa, con 8.350.
Los datos sugirieron que los efectos de la crisis del crédito se propagan por toda la economía mundial.
"La demanda global mantiene activas a las firmas tecnológicas pero hay cada vez más señales de que la economía global empieza a sentir el impacto de nuestra crisis bancaria", dijo el informe.