La Comisión Gremial Interna de la empresa Kraft Foods (ex Terrabusi) de la localidad bonaerense de General Pacheco explicó que los 160 despidos decididos el martes último por la compañía fueron "una represalia por las demandas de medidas sanitarias ante la Gripe A".
"El monopolio multinacional norteamericano se burla de las leyes argentinas y no acata la conciliación obligatoria dictada por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada", afirmó la Gremial.
Los representantes de base aseguraron esta noche que los directivos "amenazan" al personal con "el desalojo de la planta".
Los trabajadores decidieron en asambleas y unánimemente continuar el paro en los tres turnos y oponerse a cualquier intento de desalojo y reclamaron al gremio que lidera Rodolfo Daer la convocatoria a una huelga nacional de la actividad.
"Las centrales obreras deben exigir que la empresa retrotraiga la situación. El movimiento obrero tiene que apoyar esta lucha contra un monopolio que violenta las leyes argentinas y golpea sin piedad a 160 familias", indicó un comunicado de la Gremial.
Los delegados de base convocaron para las 14 de este viernes a un acto multisectorial de "solidaridad" en la puerta de la fábrica, en Henry Ford y la Panamericana, e invitaron a diversos sectores sindicales, sociales, políticos y eclesiásticos de la zona.
Los trabajadores cortaron la Panamericana para denunciar que la compañía no acata la conciliación dispuesta por Tomada por un período hábil de 15 días en el conflicto que enfrenta al Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA) y la empresa multinacional por 160 despidos.
La Comisión Interna explicó que la ex Terrabusi incumple el instrumento legal porque "no asigna tareas a los trabajadores reincorporados", según informó el delegado Ramón Bogado.
Un grupo de trabajadores permanece en la empresa en estado de asamblea permanente, en tanto otro realizó el corte de la autopista desde las 7.30, indicó el representante gremial.
En la compañía multinacional -ex Terrabusi, de capitales norteamericanos-, dedicada principalmente a la producción de galletitas y alfajores, cumplen tareas 2.000 trabajadores.