Es necesario plantearnos si el sistema laboral argentino tiene racionalidad

Algunas reflexiones del Dr. Juan José Etala (h) y del Dr. Stefanoni con respecto a la realidad sindical de la Argentina de los últimos 10 años por lo menos.
Numerosas reformas legislativas están limitando el ejercicio del ius vivandi. Poco a poco, se está llevando el derecho del trabajo al derecho civil.
Cada vez más aparecen en las medidas de acción directa los temas políticos. “La transformación de un conflicto laboral en un tema social deja en condiciones de inferioridad al empleador” señala Etala.
La legislación laboral actual está siendo bombardeada por la OIT que ha emitido dictamenes diciendo que la legislación argentina no se ajusta al convenio que la OIT de libertad sindical. La Corte ha emitido fallos a favor de quienes no tienen ni siquiera personería gremial.

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Hugo y Pablo Moyano. Hugo Moyano liderará la CGT unificada durante el gobierno macrista.

Muchos abogados laborales de empresas aseguran que vienen tiempos de numerosos conflictos. A esto hay que sumarle que la policía no se presenta cuando se quebranta la ley o se corta el paso de ciudadanos para despejar el lugar.
Los más pesimistas aseguran que desde el poder político, quieren que la lucha política se libre dentro de las empresas.
No obstante la legalidad sindical se está resquebrajando, la cuestión colectiva en Argentina será complicada. En muchos casos los gremios piden modficar el convenio colectivo de trabajo, y son aumentos salariales encubiertos.
“Hay convenios donde se eliminaron las categorías de ingreso, por lo cual aumentó el piso salarial” dice Etala.
Estamos entre la demagogia y la utopía. Esto es un caldo para que aumente el conflicto y el trabajo en negro. No hay una legislación laboral y de la seguridad social que se ajuste a la realidad.
El paro no es precedido de ninguna instancia previa de negociación como dice la ley. Hoy practicamente un sinnumero de situaciones mas definidas en lo legislativo, terminan en tribunales. Por un cuestionamiento de liquidaciones finales de salarios, indemnizaciones, qué conceptos integran al retribución del trabajador.
Venimos asistiendo a un sinnúmero de reclamos judiciales donde no se debate la justa causa de un despido (lo que ocurría historicamente) sino la insuficiencia de la indemnizacion, (porque no me consideraron esto o lo otro).
“La contracara de esto, es que las medidas de fuerza irrumpen sin ningún tipo de negociación previa”, señala Stefanoni
Hoy primero viene la medida de fuerza, y después la negociación. Se ha invertido el orden. Primero, algunos sindicatos, tratan de desangrar la actividad productiva de la empresa y despues se sientan a negociar.
Seguimos en un sistema de negociaion colectiva casi irracional. Negociar convenios colectivos por actividad, (el de comercio se aplica a 1 millón 200 mil empleados) es pretender englobar en un convenio una diversidad imposible. No hay manera que se negocien condiciones de igualdad para tanta gente, de distintas partes del país, de empresas completamente diferentes, desde hipermercados hasta almacenes de pueblo grandes bancos o empresas agroexportadoras. Los convenios colectivos deben ser por empresa, como son en España o Francia por ejemplo.
Un ejemplo de que tan desquiciado está este sistema laboral.En la actividad marítima, se pretende que la empresa reconozca una supuesta filial de un sindicato argentino en Paraguay.
El sistema no se replantea, no se analiza y eso es lo grave. Los sindicatos sólo buscan aumentar su recaudación, donde se toque esa variable estallan, mientras que otros temas claves para los empleados no les interesan o los tratan muy de refilón.
El convenio colectivo de empresa, que negocia la empresa A con el sindicato único, que conoce la realidad de la empresa y hasta donde se puede llegar y que temas les interesa. Esa es una buena práctica.  Un convenio de empresa y negociado con un sindicato específico de esa empresa de manera transparente. Es el modelo que funciona en el resto del mundo.

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